El Cocido es una comida con muchas variantes y muchos gustos:
- Caldo para sopa de pan o de fideos
- Garbanzos gordos o chiquititos
- Verduras acompañando al guiso: zanahoria, judias verdes, repollo…, o cocinadas y rehogadas a parte con cebolla
- Tocino… sin comentarios
- Huesos de jamón, de espinazo, vaca….
- Carne: morcillo, falda o cuello de ternera, cordero…, chorizo, muslo de gallina….
Hoy en día para mí así sigue siendo y durante un tiempo que tuve que ponerme un poco en cintura, o más bien reencontrarme con ella, desarrollé mi propio método para hacer los rellenos más ligeros y comerme así alguno más.
- 2 huevos completos y 1 clara de huevo
- pan rallado (poco, ya veréis)
- ajo en polvo
- sal
Precaliento el horno a 200º. Se montan las 3 claras a punto de nieve con una pizca de sal.
Recién hechos así están buenísimos y esponjosos. Y si los quieres cocer en el caldo del cocido también salen estupendos, y con bastante menos grasa. Al desechar una yema descontamos calorías y grasa, al ser el batido tan esponjoso con las claras a punto de nieve, necesitamos menos pan rallado, y al cocinarlo en el horno en moldes de silicona, que a demás no necesitan ser engrasados, nos evitamos el aceite que absorberían en una fritura normal.